¿Quien soy?
¿De donde vengo y a donde me voy?
En mi tierra ya soy extranjera,
aunque conozco las costumbres y hablo la lengua materna,
dicen que hablo de otra manera.
Y en otros países
yo no tengo raices.
En todos lados soy diferente,
por la forma del cuerpo,
o en la mente.
Desde los cuatro años estudiaba inglés,
me dijeron: “¡Es la lengua de poder!”
Pero mi poder lo encontré en la riqueza de saber,
por eso además después
empecé con alemán y francés.
Mis papas no me dieron otras opciones,
porque en sus opiniones
las lenguas como español y bielorruso
no te dan permiso
“¡Para sobrevivir necesitas una visa!”
Esto me han enseñando
los pobres padres, que nunca han visto
pero han escuchando
que en los lados de oeste,
hay una vida mejor que la nuestra.
Me dijeron: “Todo está mejor
que existir debajo las botas de un dictador.
Si no te escuchan en tu idioma,
si tu dolor para el gobierno es una broma,
debes buscar los caminos
para decirles a otros como sufrimos.
Debes luchar por tu felicidad
y la de gente que sin libertad
no puede ser verdad.
Y claro, Anita,
no vas a tener una vida bonita:
primeras generaciones de los extranjeros
son como el estiércol por la tierra,
pero quizás tus hijos
tengan la vida de los ricos.”
Como no tuvimos mucho,
cada dia era una lucha:
para sobrevivir -
que no cobró por la alimentación
fue por los gastos de mi educación.
Buscamos un talento
que podríamos vender por la beca del poniente.
Y aunque me enseñaron amar mi hogar,
salí para empezar en otro lugar.
Cambio mucho, por supuesto,
me gusto la vida de oeste:
los pensamientos libres,
los oportunidades increíbles,
yo descubrí que es vivir sin miedo
y ya pense: “Aqui me quedo!”
Pero el tiempo pasaba
y cambio todo lo que pensaba.
Al final, lo que tienes nunca es lo que quieres,
como dice el dicho de mi tierra:
“Es mejor allá donde no estamos,”
Siempre algo sobresaliente buscamos.
Y aunque parece libre de la gente actitud,
Ellos también viven en esclavitud,
pero lo peor es que en su mente
no tienen este conocimiento.
Con sus ojos ven la elección,
pero qué elegir no es su decisión.
Viven con la ideología del consumismo
Y solo piensan de sí mismos.
No todos son asi, es claro
No todos se hacen de lo mismo barro.
Me siento muy afortunada,
porque alla he encontrado
amigos muy amables, inteligentes
muy amistosos, buenas gentes,
que por ellos cambiaría mi opinión,
pero tristemente son una gran excepción.
¡Y aunque es cierto,
soy nada más que mierda en este país,
padres, pobres, allá estoy feliz,
pero la alegria de cada momento
me cuesta gran sufrimiento,
cada sonrisa es una pena
cuando se que mi gente duerme sin cena
y no es justo,
que mientras pase mi tiempo con gusto!
-
Pero basta, ya veo
es nada mas que gimoteo.
Esta historia no es muy especial
Y la tendencia es mundial:
muchas quieren salirse su hogar
Porque felicidad allá no pueden encontrar.